Mar de palomas [Priv.]

por Krassen Crowley Lun Sep 09, 2013 11:58 pm

Habia concluido mi largo periodo de entrenamiento, estaba satisfecho con los resultados que habia conseguido con ayuda de las diferentes personas que me guiaron en la adquisición de mis poderes algo sobrenaturales, todos utilizando la famosa energia que llevamos dentro, el cosmos, concepto que aún no terminaba de entender. Ahora me encontraba en... la verdad no estaba muy seguro de donde estaba, digo, se que estaba cerca de Rodorio, y quiza cerca de la entrada del inframundo, la cual requiere el octavo sentido para utilizarla, algo que ya domino.

Como llegare ahi?~

Murmure un poco despreocupado, el asunto era de urgencia, mas no de suma importancia, si mi diosa me necesitaba en estos precisos instantes, ella buscaria la via mas rapida para que nuestro encuentro se de, mas nada de eso a ocurrido. Asi que, seguire observando el oceano, necesito un poco de descanso, no hace mucho habia terminado con la rutina diaria que vengo llevando desde hace mucho, cosa de que estaba medio agitado, el sudor cubria mi torso desnudo, y el parche de mi ojo derecho estaba medio humedo por eso.

La vista en este lugar era envidiable, y lo hacia mas interesante el hecho de que habia un mar de palomas surcando los cielos sobre mi, lo que me daba un poco de miedo a que alguna decidiera dejarme un regalo, si es que entiendes la metafora, y digo mar por la cantidad exagerada de esas criaturas que volaban en dirección al oceano, pero por que tantas? se decia que con el movimiento de los animales, se podria predecir hechos importantes que estaban por ocurrir, pero, debia de preocuparme? Nop, no lo creo.

Como sea, me mantuve sentado sobre el pasto de aquel risco, relajado totalmente, esperare a que se me qutie el cansancio y luego podre irme en busqueda del inframundo, aunque me seria mas conveniente encontrar a alguien que sea de ahi, o que sepa como llegar.

por **Etsu** Mar Sep 10, 2013 2:55 am

Tenía cosas pendientes por realizar, cumplir órdenes y buscar todos esos seres que fueran peculiares denotando alguna especie de cosmo, así como averiguar si eran guerreros al servicio de algún dios o eran dioses recién despertando. No resultaba el trabajo más sencillo del mundo pero debía comenzar y darme prisa si no deseaba recibir algún castigo si fallaba en tan noble encomienda.

De norte a sur buscando cada milímetro hasta llegar a una zona cercana al mar, había algo curioso una extraña presencia que destilaba cierta particularidad, misma que servía como un imán atrayendo a un sencillo clip. Aproximo sus pasos con cautela, sin necesidad de ocultarse en las sombras, con pasos cortos y ligueros, mirando intrigada la espalda de un sujeto que se hallaba sentado en la orilla. Estaba tan tranquilo no parecía representar ninguna clase de peligro, por lo cual sus pasos siguieron hasta aproximarse lo suficiente.

Apreciando el que no tuviera una playera, acaso se encontraba a un exhibicionista empedernido? Torció la boca a manera de mueca a manera de desaprobación, mientras pisaba una rama muy ruidosa que anunciaba a la visitante no invitada. Sintiéndose tan fuera de ligar, su ropa delataba como una foránea, no conocía el lugar, no parecía pertenecer a alguna aldea, mientras que toda su esencia llevaba la marca del inframundo, la mirada vacía, los colores que la envestían así como su particular color de cabello y el broche de cristal que hacia juego con sus ojos.

-disculpe no era mi intención interrumpir- titubeo un instante al pronunciar aquellas palabras, tan avergonzada de haberse evidenciado a sí misma, no sabía aun nada de lo que percibía en él pero sentía que entre más rápido lo averiguara sabría mejor como manejar la situación.

por Krassen Crowley Mar Sep 10, 2013 5:16 pm

En aquella tarde tranquila, en la que me encontraba en aparente soledad, las aves se manifestaban en los cielos, moviéndose en dirección contraria al curso del viento que chocaba fuertemente contra mi, aún mas por la altura en la que me encontraba. Mas que un fenómeno de la naturaleza, lo vi como un espectáculo de los que pocas veces seria capaz de presenciar en este mundo, uno natural, que en el pasado no pude apreciar por mi estilo de vida lleno de riquezas y mujeres de un lado a otro, extraño lo segundo eso si, era de lo mejor del mundo, ahora solo estaba reducido a no tener casi nada, lo único que me hacia especial era el hecho de que mi alma tenia dueña, pero desde el punto de vista de un mortal, era lo mismo a no tener nada.

En las cosas que me hacia pensar el solo ver un montón de criaturas emplumadas en lo suyo, y recién me di cuenta de que alguien había llegado a este sitio, eso fue lo que intuí en el momento que escuche una pequeña rama quebrándose, ese sonido de la madera seca inconfundible, y si fuese alguien con malas intenciones, yo ya hubiese muerto, por lo que no tenia mucho de preocuparme, supongo.

Mis oídos captaron una voz femenina pidiendo disculpas, me di vuelta un tanto curioso, y efectivamente tenia frente a mi a una chica un tanto bajita, delgada, con un cabello poco usual, de color negro y a la vez blanco, y una vestimenta un tanto extranjera, ella no pertenecía a ningún sitio cercano a este, no, ella no era de Rodorio.

No tienes por que disculparte, tu presencia aquí hace esto un poco mas ameno.~

Me levante de mi sitio, mirando de pies a cabeza a la señorita, la cual salia de todos los estereotipos que me había hecho del aspecto de las femenino que me había hecho a lo largo de mi vida, si podría dar una descripción de una palabra con solo su imagen, se podría decir que era alguien reservada. Sin mucho esfuerzo, cree una rosa blanca que aún no se había abierto, esto me era posible por que manejo elementos naturales que me permiten lograr aquello.

Bonita vista no? no, no hablo de mi torso desnudo, mas bien de aquella vista al mar, y las palomas enloquecidas que vuelan contra el viento, no es algo que se vea todos los días, no lo crees?~

Me fui acercando sin ningún tipo de precaución, no creo que ella fuese a responder agresivamente, espero que no lo hiciese, aunque no me sorprendería si se da el caso. Después de haberme acercado lo suficiente, a pasos lentos que eran amortiguados por el verde pasto a nuestros pies, extendí mi mano, la cual llevaba aquella tímida rosa que no se dejaba ver en el interior.

Mi nombre es Darius, dime, con que nombre debo llamar a la señorita que tengo delante de mi?~

Le dedique una amistosa sonrisa, esperando aún que ella tomase aquella flor, la cual estaba completamente seguro que una vez su tallo sintiese el calor del tacto femenino, se abriría y dejaría ver su interior.

por **Etsu** Miér Sep 11, 2013 12:39 am

Entendía muy poco del mundo al que había renunciado, apenas si era capaz de recordar cual grato resultaba apreciar una vista como esa dando al mar, pero a su vez encontraba un tanto absurdo el perder tiempo de aquella manera pasando horas y horas mirando el infinito, quedarse inmóvil y escuchando esos sonidos de la naturaleza que a si bien podían tranquilizar los encontraba un tanto irritables después de mucho tiempo. Retrocedió un paso al notar que el joven se levantaba, por mera precaución.

¿Por qué me recorría con la mirada?, era tan incómodo que las personas hicieran eso después de tanto tiempo, pero una parte de mi sabía que era lo más normal para alguien que no perteneciera a su mundo el verle de aquella manera, era una extraña con pintas de lo más raras, lo cual sonaba demasiado normal y lógico apreciando ese aspecto.- cabeza de aire- murmuro para sus adentros precipitando su juicio sobre el nuevo, decir palabras como esa, ¿a quien le importaba si bailaba desnudo o estaba abrigado hasta el cuello?.

Una equivocación, no estaba del todo segura pero aguardaría mas hasta reconocer en su totalidad a lo que se había encontrado, manteniendo la mirada sobre aquel joven mayor de estatura, era corpulento y parecía confiar mucho en sí mismo como para aproximarse, hasta lograr producirle un sonrojo al sentir tanta proximidad. Ante lo cual levanto diestra para tomarle de la muñeca y buscar apartar su mano, tanto tiempo había pasado sin sentir algún gesto similar que inclusive había olvidado lo que era ser tratada como una chica.-mi nombre es Etsu… y como te habrás dado cuenta no soy de por aquí solo estoy de paso- tomo entre sus manos aquella flor que ofrecía como una especie de ofrenda de paz, mas esta parecía comenzar a perecer en sus manos marchitándose gradualmente.

Era bueno acaso que algo como eso pasara a los ojos de un extraño, aunque al verlo más detenidamente encontraba un detalle curioso tenía un parche al cual se quedó mirando por un largo rato olvidando lo que había pasado con la flor.

por Krassen Crowley Miér Sep 11, 2013 1:25 am

Las cosas no transcurrieron como lo esperaba, pero siempre estaba abierto a nuevas posibilidades, que algo así haya pasado me volvió mas interesado en hacer que aquella chica aflore, de alguna manera. Era muy observador aún cuando menos lo esperaban, y vi con claridad su rostro sonrojado justo en el momento que nuestras distancias se acercaron, incluso se le noto algo... no se si nerviosa, o quizá a la defensiva, no tardo en agarrarme de la muñeca, pero al final tomo la flor, y esta en lugar de extender sus pétalos, simplemente murió sin siquiera poder demostrar su belleza a la luz del día.

Así que Etsu, es un bonito nombre, nunca antes en mi vida lo había escuchado, pero supongo que eso te hace diferente a las demás. Y no tienes por que irte tan pronto, me gustaría disfrutar de tu compañía tan siquiera una par de horas.~

Observe la flor marchita en sus manos y silbe por unos instantes, no se de que manera tenia que reaccionar ante eso, lo primero que tenia en mi mente es que ella no era como las demás en su totalidad, y que podía manejar el cosmos tan bien como yo, o quizá un poco mejor, quien sabe.

La flor tenia un pequeño significado para mi, señorita, era la primera impresión que me diste con tan solo verte, una chica muy reservada que no se abre a las personas, o quizá solo a algunas, y no pretendo querer meter el dedo en la yaga, pero quizá hayas tenido un pasado que te hace ser como eras, o me equivoco?~

Me estaba metiendo en terreno en el que usualmente no me meto, no me gusta involucrarme de tal manera con las chicas que conozca, por que ya me a pasado que termino siendo odiado por ellas, y no es lo que busco.

"Eso no te incumbe" me podrías decir, y dices toda la verdad, tu pasado nada tiene que ver conmigo, por que te acabo de conocer, pero eso no me impide el querer ver a una bella flor extender sus pétalos, una hermosa rosa como tu.~

Le saque la lengua, quizá la este fastidiando con mi charla tonta, pero eso no me importaba, yo hallaría la forma de que se muestre de una manera diferente, cueste lo que cueste, y mientras mas resista, mas motivación me dará, ese simplemente era yo y mi forma de ser. Note que su mirada llevaba rato fijada en el parche que llevo sobre mi ojo derecho, quizá este pensando que bajo el no hay nada, que averigüe por ella misma.

Si quieres ver bajo mi parche, puedes quitármelo si gustas, no me quejo.~

Me agache un poco, solo hasta la altura suficiente para que ella pudiese quitar, poner, ver y apreciar, y solo para que supiese que miedo era la ultima cosa que me haría sentir, le tome la mano por un breve tiempo. El mismo que duro la flor en ella y termino marchitándose.

por **Etsu** Miér Sep 11, 2013 2:19 am

Quizá no se lo habías oído a una mujer- agrego comenzando a recuperar esa confianza que le había hecho retroceder, no tenía por qué dejarse intimidar de ninguna manera por un sujeto como ese, sonreía de medio lado más la calma volvía a desaparecer con las palabras que había captado.- no sé de qué hablas- replico tratando de convencerse a sí misma de una verdad evidente.

La tragedia y la resignación, eran parte de ella ahora, no se arrepentía de nada y era feliz de ser como era o de menos eso creía, estaba orgullosa de ser un juez de no ser como el resto de las mujeres, más en aquellas palabras encontraba un punto débil, al que no deseaba conducirle. Soltó una risa burlándose de lo que decía, no estaba del todo equivocada debía tener alguna especie de talento innato no solo para hablar- las flores más hermosas pertenecen al reino de los muertos donde jamás morirán- entre metáforas y deducciones esperaba entendiera su comparación que pretendía seguir, si deseaba llamarla una flor encontraría las espinas se encontraría con una de las más curiosas posesiones del inframundo.

Y con el permiso otorgado, se permitía también permanecer más tiempo siguiendo el juego de lo que había encontrado hasta descartar supuesta divinidad, sus dedos con cuidado levantaron el parche alimentados por la curiosidad de saber que escondía o por que esconderlo, pero no encontraba nada relevante su ojos solo parecía tener una coloración distinta y bastante peculiar-¿Que eres realmente tú?- opto por dejar la precaución e ir directo al interrogatorio, pues al mantener su mano atrapada por la de él lograba volver a percibir ese cosmo débil y confuso. Tan poco era el tiempo que el tacto se mantenía, apenas si oponía resistencia temiendo que de esta manera el chico aquel lograra ver más de lo que no debía ser conocido, de aquello se convirtió en su secreto. –detrás de esas sonrisas y todo el numerito de propiedad sé que existe algo más, puedo asegurarlo, confiesa tu obscuro secretito Darius

por Krassen Crowley Miér Sep 11, 2013 4:48 am

Que soy? ni yo mismo lo se con claridad, solo soy alguien con mucha suerte que vive gracias a la misericordia que me tuvo la señorita Persefone momentos antes de que la muerte me devorara y Hades me condenara.~

Le di una respuesta rápida a mi pequeña amiga, la cual había reaccionado mas o menos como esperaba cuando mencione lo de su pasado, entre risas y diálogos de total negación, cual rosa que no quería abrirse, ella me repelía, resistiéndose a lo que yo considero es mi encanto principal, mi manejo de las palabras y todo lo que consigo haciendo buen uso de ellas.

Y te equivocas, este no es un numerito, yo tiendo a ser muy respetuoso con las mujeres, no le levantaría la mano a una nunca, y de igual manera las trataría como lo que son, valiosas.~

Con una sonrisa picara, y lleno de atrevimiento, aproxime mi mano al rostro de Etsu, acariciando su mejilla suavemente, mirándole con ambos ojos, tenia que concentrarme en lo que importaba en estos momentos y era el saber un poco mas de esta persona, después de todo hubo una oración que ella menciono la cual me dejo pensante, el bombillo brillaba básicamente, "las rosas mas hermosas son las del inframundo".

Eres una rosa del inframundo entonces, lo curioso es que me dirijo hacia ese lugar, aunque no tengo idea de como llegar ahí, sin embargo me siento afortunado, me encontré con una rosa del inframundo fuera de este, y puedo confirmar que lo que dices es totalmente cierto, "las rosas mas hermosas pertenecen al mundo de los muertos...", y tu pareces encajar en esa descripción perfectamente.~

Nunca había vuelto a una postura decente, me mantuve agachado para poder observarla frente a frente, y poder recibir cualquier "bofetada" de la manera apropiada, si ella sentía la necesidad de liberar tensión de esa manera, que lo hiciera, estaba en todo su derecho.

Tú... por que reías? lo único que vi en ese momento fue la negación de una verdad, un corazón afligido, vació quizá, que intenta por todos los medios esconder algo, demostrando gestos fingidos...~

Retire mi mano de su mejilla y la tome de las manos nuevamente, a pesar de que mi agarre era lo suficientemente suave para no lastimarle las manos, no era uno fácil de deshacer, y a pesar de que esto en su totalidad no tenia nada que ver conmigo, mi sentido de la curiosidad me impedía dejarla en paz.

Por que lo haces?, Etsu~

Pregunte, con una voz llena de intriga, interés.

por **Etsu** Miér Sep 11, 2013 4:28 pm

Una mueca de disgusto se posesiono de su rostro, lo que encontraba no resultaba relevante en lo que se le había ordenado buscar, un sirviente y no de cualquiera de esos dioses, sino que casualmente resultaba ser de aquello que estarían aliados, una diosa de la cual desconfiaba más por la naturaleza de la que procedía aquella mujer que compartía trono. Aun no la conocía, pero seguía sin simpatizarme la idea simplemente por ser ella.

Siendo así de respetuoso, ¿no tendrías problemas si tu rival resulta ser una mujer?- mofo dudando de que ese caso aplicara, al elegir seguir la vida que tendría de ahora en adelante más considerando a servicio de quien estaba, debía olvidar un par de esas etiquetas de cortesía y galantería absurda, esos pétalos marchitos, eran tan distintos a nosotros los espectros. – podría guiarte hasta allá, pero… que ganaría yo? – agrego con algo de dificultad como si le costara en concentrase en las palabras que debía decir, Darius estaba comenzando a ser una molestia que no había sentido antes. Pero no estaba molesta quizá solo se sentía incomoda, tenía tanto sin hablar con otro ser ajeno a su mundo, tenía tanto sin ser tratada como una joven delicada cual flor, era eso lo que la irritaba de distintas maneras y en diversos grados.

Los jueces no tenemos corazón, si lo tuviéramos sencillamente no serviríamos a Hades-sostuvo la mirada desafiando sus palabras, estaba segura de eso no negaba más que un sentimiento y era que conocieran el secreto que la ataba por encima de todas las cosas al reino de los muertos, se jactaba de la posición que ostentaba entre tantos espectros la primera mujer en mucho tiempo que lograba convertirse en juez, aquella deseo alguna vez ser hombre para que no le tuvieran consideración alguna.- Ni uno solo de mis gestos finge ni escondo nada- musito tranquilamente convenciéndose a sí misma de que así era, no sabía fingir cuando estaba avergonzada o cuando estaba molesta, solo trataba de controlar para que las emociones que aún no dominaba no salieran de control y causaran un problema.

Tenía una razón de ser, se había prometido a sí misma no ser débil nunca más, de pelear, caer y levantarse siempre que su señor la necesitara, permaneces ante sus ojos en estado de gracia para que de ninguna manera le negara resguardar en la mejor de las zonas del inframundo el alma de su hermano.- estas demasiado cerca- coloco la diestra sobre el pecho para dar un empujón y apartarlo, necesitaba mantenerlo lejos d su espacio vital.

por Krassen Crowley Miér Sep 11, 2013 8:22 pm

Nuestro encuentro se ponía un poco mas tenso conforme avanzábamos en el dialogo, ella parecía seguir negándose, escondía algo y definitivamente querría saber de que se trataba, con un pequeño empujón me alejo, pero eso no no me impidió tomarla de la mano y fingir que tropecé, solo para caer de espaldas contra el suelo y obligarla a quedar sobre mi, siendo su amortiguador para que no se lastimara en la caída.

Vaya, que atrevida, querías mas cercanía.~

Cruce mis brazos atrás de mi cabeza y mire hacia el cielo, luego de haber hecho aquel comentario un poco burlón, no era mi intención fastidiarla, pero si lo era el que se sincerara completamente, que aunque yo fuese un desconocido, tenia un hombro en el cual dejar un par de lagrimas si sentía la necesidad de hacerlo, que yo trataba de entenderla y ser su amigo, bueno, eso ultimo es algo incierto tratándose de mi y mis maneras hacia las mujeres, pero me gustaría que fuésemos cercanos, después de todo compartiremos el suficiente tiempo estando en el mismo sitio, el reino de los muertos, y no podrá hacer nada al respecto.

Si mi rival fuese una mujer, simplemente ignoraría su presencia, me iría y la dejaría en paz, créeme, no hay manera de que me hagan agredir a una, ni aunque esta tenga una daga en mi cuello y este a punto de matarme, si ese fuese el caso, hay formas de impedirlo sin lastimarla.~

Seguí observando las aves, mientras meditaba un poco sobre la situación en la que nos encontrábamos, era muy seguro de que ella terminaría pateandome, golpeándome, o quizá solo se iría, cualquier resultado de mis acciones me daba igual, mientras que el resultado que yo quiera salga, para mi todo es valido.

Que no tienes corazón dices, yo puedo sentirlo, esta latiendo fuertemente, anunciando que estas viva. Puede que tu corazón le pertenezca a Hades, al igual que mi alma le pertenece a Persefone, pero eso no quita que tienes la voluntad de ser como eres, y no mantenerte al margen de una actitud que no eres tu verdaderamente, piénsalo, ambos estamos ligados a dioses por situaciones del destino, pero eso no nos obliga a intentar encajar en un molde, o esa es mi creencia...~

Suspire, me estaba entrometiendo demasiado en la vida de esta muchacha, pero no se, quería saber mas y mas de lo que ella era, a mi vista era una flor tímida, y yo solo quería ver, quería apreciarla debidamente, solo eso.

No tengo nada que ofrecerte por tu guía, dependeré de tu misericordia supongo, si terminas negándote ni sera problema, de cualquier forma terminare encontrando la manera de entrar y tendrás que lidiar con mi presencia en el inframundo, que para estas alturas te a de resultar molesto y fastidioso el solo hecho de argumentar conmigo, o me equivoco?~

por **Etsu** Vie Sep 13, 2013 2:49 am

QUE!! NO yo…no de ninguna manera!!- el rostro totalmente enrojecido había fracasado en apartar al chico y en cambio era víctima de su propia acción, evidenciada por acusaciones totalmente falsas, por un chico totalmente pretensioso queriendo torcer las palabras y usarlas a su conveniencia. Ni tubo siquiera que pensar, cuando repentinamente se veía golpeándolo en el pecho con el puño cerrado y a manera de berrinche, golpes que no debían doler, no era una pelea oficial solo era la rabieta y la frustración de no poder lastimarlo más.

En definitiva era la primera vez que lograba hablar con un chico sin querer matarlo inmediatamente, estaba provocando morderlo o quizá patearlo pero después tendría que explicar la razón del por qué o inclusive molestar a su señora y esta a su vez informar a hades y comenzar una cadena de des fortunios que no quera asumir. Contenido todo esos pensamientos para volver a recuperar el pálido color-¿Como podrás defender a Persefone entonces?si su vida dependiera de vencer a una chica…No existe otras maneras sin lastimar- cuestiono antes de poder levantarse resultaba cómodo estar encima suyo, como tener un propio colchón algo inestable pero mejor que estar sobre el piso.

Te equivocas…quizá no existe un molde pero terminas adaptándote- desvió la mirada antes de intentar levantarse, al hacerlo se movía despacio de manera gradual evitando volver a tropezar por alguna torpeza propia, reacomodaba sus ropas y cabello, extrañamente estaba siendo una mujer, si este viera sido otro caso no se preocuparía ni por como luce o que tan grácil se movia.-te llevaría pero no puedo regresar sin cumplir mi trabajo- acoto mirándole de reojo, estaba tratando de ser buena con la finalidad de no tener de verdad que verlo por su esfera cuestionando todo.

Si bien podría…- medito más tranquilamente evaluando su propia capacidad, no estaba segura que fuese útil o no, no lo había intentado con otros seres mucho menos humanos-tratar de mandarte a mi modo- una sonrisa socarrona apareció de nuevo en su rostro, era eso lo único que podía ofrecer a cambio de que desistiera en conocer una verdadera naturaleza, que más que eso era un secreto.

por Krassen Crowley Vie Sep 13, 2013 5:54 am

No necesitas avergonzarte de nada, puedes pedirme lo que quieras, un abrazo, un beso si así lo deseas~

Ella respondió de una manera un poco infantil, haciéndome masajes en el pecho con sus puños, me hubiese podido ver su cara a la perfección, pero ya me la imaginaba, ese pálido rostro tornándose de un color rojizo. Ella aún seguía cuestionando mi posición de no lastimar a las mujeres, ideando todo tipo de situaciones que son poco probables de que pasen, empujándome hasta mis limites supongo, quiere saber que tan fiel soy a mis palabras.

Aunque la vida de mi diosa dependa de que yo levante mi mano contra una mujer, seguiré mis palabras con fidelidad, ademas, mi diosa no es una mujer débil a la que puedan simplemente atentar contra ella, es la esposa del rey de los infiernos después de todo, una diosa, como tal tiene sus maneras de imponer respeto, no lo se, no la conozco, de cualquier manera yo no lastimaría a una chica, pero eso no me exime de proteger mi bienestar o el de mi diosa, y conste que proteger y lastimar son dos cosas muy diferentes.~

Di una explicación medio larga, espero que esta sea la ultima vez que tenga que hablar al respecto de esto, me aburría que me preguntaran lo mismo una y otra vez, mas no lo demostraba abiertamente, supongo que al igual que yo, ella es insistente, aunque cada uno de su manera. Antes de levantarse, menciono algo sobre la inexistencia del molde, que todo era parte de la adaptación, algo con lo que difería, mas sin embargo entendía, me dejaba un poco pensante el acerca de la actitud de los otros dos jueces, si con esta apenas puedo tratarla, que tan antisociales serian sus compañeros?.

Trabajo uh, eso es aburrido...~

Mencione un poco desinteresado, para levantarme, sin apartar la mirada de la pelinegra... o peliblanca... esa combinación extravagante de colores en su cabello me hacia dudar siquiera de que termino utilizar en su caso. Había accedido a llevarme al inframundo, eso dijo, pero que una asignación no le dejaba, mas sin embargo tenia su forma de enviarme hacia alli, algo a lo que negué con la cabeza, quería ir, mas no estaba listo.

Aprecio tu interés en querer ayudarme, pero creo que es muy pronto siquiera para que pienses en hacerlo, vamos, dije que quería pasar tiempo contigo.~

Caí en el atrevimiento nuevamente, aunque esta vez cruce mas limites de los que ella podría tener establecidos, y rodee su cintura con mi brazo derecho para juntarla a mi cuerpo, de manera delicada, no chocando su rostro contra mi pecho barbaricamente, mientras que con la mano izquierda acariciaba su cabeza de pelo bicolor.

No importa si no quieres compartir lo que estés guardando conmigo, lo entiendo, soy un desconocido y como tal tengo limites a tu confianza, y no se si sirva de algo, pero yo no te veo como un bicho raro, te veo como una chica, claro, debajo de esa capa de amargues, responsabilidad y frialdad, hay una señorita que también necesita atención, que le digan cosas bonitas y la hagan sentir bien, en el buen sentido de la palabra, y no me importaría ser aquel que haga esas cosas por ti.~

La separe un poquito de mi, solo para poder observar sus ojos, aquella profunda mirada que me transmitía tristeza al corazón, ella no me lo decía, tampoco su imagen lo reflejaba, pero sus pupilar me mostraban sufrimiento vivido, y mi forma de ser simplemente no me permitía ignorar aquello, así que hice algo completamente inesperado, dudo mucho que lo haya visto venir, inclusive no tenia intención de hacerlo, no con tan solo habernos conocido. Le abrace y proseguí a tomarla de la cintura para elevarla, hasta que nuestros rostros estuviesen a la misma altura. Sonreí de manera relajada, realmente no me importaba lo que ella pensaba en estos momentos, simplemente hice que nuestros labios se conocieran por primera vez, en un roce suave y prolongado, el cual luego interrumpí.

Si quieres matarme por eso, esta es tu oportunidad Etsu, por que lo hice? por que siempre hago lo que quiero, me simpatizas, y ademas, toda chica tiene que haber besado a alguien tan siquiera una vez, esta es tu primera, o me equivoco?.~

Me reí y le mostré la lengua, como si lo que acabara de hacer hubiese sido una jugarreta infantil, pero, realmente esta ultima acción podría definir mi estatus para ella, podría ser un amigo irritante, o un enemigo a muerte. No la solté eso eso, la abrace nuevamente, apoyando mi mejilla sobre su pecho.

Y si te a molestado, disculpa, aveces puedo ser un poco precipitado en mis acciones, pero es mi manera de ser, yo no cambio por el hecho de que ocupe un rango dentro de las filas de un dios, sigo siendo yo mismo en esencia, para que cambiar y ser igual a los demás, cuando puedes ser tu mismo y ser especial? Para los dioses somos peones reemplazables, la vida de ellos es infinita, la nuestra solo dura unos segundos para ellos, aquel valioso tiempo que tenemos hay que aprovecharlo de manera que nos sintamos bien con nosotros mismos cuando nuestro fin llegue.~

Empece a darle mi punto de vista acerca de la vida y la manera en la que hay que llevarla, algo aburrida, larga, no era mi estilo, mas lo vi un poco necesario, seguía insistente, jode y jode con tal de verla como verdaderamente es, no como la chica amarga, si no como alguien que puede superar el pasado y mostrar tan siquiera una sonrisa.

por **Etsu** Dom Sep 15, 2013 6:18 pm

Que desperdicio resultaba preguntar lo mismo de diferentes maneras, no lograba que la respuesta cambiara solo que el pelirojo se volviera más impropio, hablaba despreocupado pero respetuoso un casanova como eran bautizados en los libros escoria y basura de los hombres si se les podía llamar así, un total desperdicio en la actuación porque eso no tenía duda era un número bastante bien aprendido que de tanto repetirlo se había convertido en parte de él razón por la cual no sabía actuar de ninguna otra más patética que esa que ya conocía.

Flores marchitas son las que resguardad a una deidad, sus convicciones sin fundamentos simplemente les llevara al fracaso- masculle entre dientes mi propia perspectiva, hasta ahora solo conocía a uno de sus guardianes, mucho antes de conocer aquella mujer, pero si así como era el joven entonces no podía esperar algo más decente de sus seguidores, necesitaba algo más fiel alguien capaz de hacerlo todo incluso de ir contra sus propios principios. No éramos más que piezas en un tablero moviéndose al antojo de los dioses pero si éramos útiles no nos remplazarían con tanta facilidad.

Y a pesar de haber guardado una mínima distancia de su peculiar persona, volvía atacar con su acoso sin sentido, escupiendo su veneno, no era nada de lo que él creía que era, no estaba amargada, si era fría pero por la falta de interés en cosas tan efímeras como falsas promesas llenas de aire calentado. No me interesaban lo que un mortal pudiera decir o hacer pues por más que se esforzara gamas seria eterno más si lograbas tener la palabra de un dios y hacerlo jurar eso duraría por los siglos. Su mano rodeaba con cuidado y la fuera que ponía en esto era considerable comparada con la poca resistencia que mantenía, intrigada por saber que tan lejos llegaría le loco aquel, mantenía la mirada fija vacía y el rostro tranquilo ya no aceleraba más el corazón pues no había sorpresas nuevas.- No hay necesidad de que tu sepas porque estoy unida al inframundo- se quedó callada, respirando lento mientras sus ojos lo reflejaban, de pronto su rostro se aproximaba y sus labios estrechaban con suavidad dejándola pasmada.

Sus labios apenas si se movieron, mientras ese claro pensamiento divagaba por su cabeza su primer beso había sido raptado por un lunático egocentrista, para cuando la soltaba la sombra que generaba su figura iba absorbiéndole adentrándose en un lugar seguro lentamente.- Darius no tiene caso manche mis manos con alguien como tu- Cada vez más se sumergía entre las sombras hasta desaparecer de su alcance, sintiendo como su rostro perdía el apoyo, segura de no volver a ser alcanzada por ese monstro de la falsedad.

Soy como me agrada ser, es como se ser y como creci- respondía sintiéndose agredida, no importaba como la percibiera, pues ahora no podía verla, estaba más relajada regresaba a su hostilidad habitual y aquellos sentimientos a los que tan arraigada estaba- Hades no me remplazara mientras haga bien mi trabajo, la ventaja de ser suya es que no conoceré la muerte pues tantas veces como reviva yo estaré a su lado…Tu disfruta de tu suspiro concedido puede que pronto se desvanesca

por Krassen Crowley Miér Sep 18, 2013 4:44 pm

Ella desapareció de mi vista, mas su presencia todavía era perceptible, no se encontraba al alcance de mis manos, o labios, ahora formaba parte de las sombras, o eso asumí. Conveniente habilidad tenia la juez, yo ya no podría aproximarmele, tampoco podría ver sus reacciones, las expresiones faciales que hacia cada vez que hablaba, sus mejillas tornándose rojizas, perdí el privilegio de ser testigo de todo eso, pero eso no me afectaba en lo absoluto, no es que me este resignando a no poder llegar a lo que quería, simplemente pienso que ya no vale la pena, pero siempre es divertido seguir molestándola.

Mas que un premio por tu contribución, lo pienso como una amenaza, te muestras satisfecha con el hecho de que trabajas para "no conocer la muerte", cuando en el inframundo la vez todos los días. Yo tampoco la conoceré de forma natural, seré abrazada constantemente con sus brazos frios, pero jamas caere en ella, mientras mi diosa sea la dueña de mi alma, nada de eso me ocurrirá, y no tuve que adaptar ninguna actitud para lograrlo. Para ti, la ilusión de la inmortalidad desaparece si no cumples las expectativas de Hades, o me equivoco? señorita Etsu.~

Aquellas palabras fueron dichas sumidas en una despreocupación total, mi forma de ser natural, no me importaba en lo absoluto nuestras condiciones de vida con cada una de nuestras deidades, pero me parecía que debía aclarar un poco el que yo no soy el que esta en una posición desfavorable.

Que no hay necesidad de que manches tus manos? por favor, señorita, como juez sabe a la perfección que lo menos que quiere es problemas con Hades, tiene un poco de temor de que mi diosa hable con su esposo y caiga un castigo sobre ti, verdad? arrebatarme la vida no es lo mas inteligente.~

Me mantuve sonriente, riendo un poco, volví a sentarme en el suelo con las piernas cruzadas, dándole la espalda al sol para mantener mi mirada fija en la sombra que se reflejaba en el suelo, era mi manera de decir que estaba afrontándola cara a cara, si se le podría decir de esa manera.

Y si, es verdad, yo no soy nadie para saber acerca de sus motivos de unión al inframundo, pero como alguien pensante, soy también curioso, y la curiosidad muchas veces me lleva a formas especulaciones, y no se, algunas veces tiendo a acertar en ellas sin querer queriendo. Nadie crece siendo tan... amargada, creo que seria el adjetivo correcto, la naturaleza general por defecto es la inocencia, y esa siempre cambia dependiendo de sucesos que hayan afectado en nuestra vida, desamores, estrés, odio a la sociedad, o simplemente... la perdida de un ser querido, no le parece?.~

Bostece, me estaba aburriendo, y era lo normal. El encuentro era perfecto hasta que ella decidió rechazar mi buena voluntad, mis deseos de hacerla sonreír, florecer como las rosa que es, y no, odio no es lo que sentía por ella, tampoco desprecio, ella se me resistía y cada vez que eso sucedía me interesaba cada vez mas, pero no de la manera sentimental.

En su caso, diría que lo ultimo es lo que encaja mas con usted, una perdida que afecto a su actitud, y que la llevo a donde pasan todos los muertos, el inframundo!, mire, las piezas están encajando!, su unión al reino de los muertos podría basarse en eso, una búsqueda exhaustiva de alguien que esta pasando por los mas severos castigos en las prisiones, mientras vas y sirves al dios que lo mantiene en esa condición.~

Tome mi mochila, por que si, traía algo de equipaje cerca, y saque una chaqueta negra de su interior, con la cual me vestí, preparándome para la llegada de la noche, mas esta no cubría mi torso por completo, dejaba ver parte.

En cuanto a mi, yo no soy una flor, soy un pétalo para nada marchito, que conforma parte de la rosa mas hermosa, Persefone, a la cual ni siquiera Afrodita puede compararcele en belleza, pero di lo que quieras, eres libre de hacerlo, como también eres libre de ser como te plazca, resguardando tu verdadero ser bajo una mascara, parece que la lleva muy ajustada, no pude quitársela, pero se que algún día se aflojara lo suficiente.~

Bostece nuevamente, me mostraba indiferente ya al si conseguiría probar un poco de la tierna carne de la señorita aquí presente, los resultados de nuestro encuentro estaban muy distantes a eso, pero que importa, ella no es la única rosa en el campo, hay muchas mas.

Mi convicción es fuerte, tengo muy claro lo que pienso y siento, proteger a la señorita Persefone sin tener que levantarle la mano a una mujer no es para nada difícil, no se que clase de crecimiento tuviste, pero se me educo para no lastimarlas, y después los incontables sucesos en mi pasado que me llevaron a mi diosa, no voy por ahí dejando mi pensamiento de lo bueno y lo malo, y no es por querer ofenderle, pero no necesito mascaras para satisfacer las expectativas de mi diosa.~

Saque la lengua, aunque se sentía raro cuando no tenias a la personas enfrente para hacerlo, de cualquier forma ella me vería, no me quitara los ojos de encima por nada en lo absoluto, o eso es lo que pienso. Anochecía, la cantidad de pájaros alocados decencia, pronto tendría que seguir mi camino hacia el inframundo, y no contaba con que ella mi llevara o me diga como llegar, contaba con la ayuda incondicional de Persefone, con la cual lograría reunirme una vez consiga alcanzarla.

por **Etsu** Vie Sep 20, 2013 4:13 pm

Estaba dudando por culpa de sus palabras, eran tan ciertas y tan falsas si estaba trabajando por una convicción, era un premio o un castigo por lo que peleaba, así lo había querido y si me ganaba la muerte entonces de igual manera me recompensaría por poder acompañar aquella persona que tanto significo en vida para mí. Mientras pudiera garantizar su seguridad en el inframundo librándole de penas y condenas que estaba segura en vida había pagado me sentía recompensada.

Entonces que era yo en realidad, alguien bueno o malo pues mi propio egoísmo me movía, justificándome en lo supuestamente correcto pero no parecía serlo precisamente, no importaba la forma, el método o el medio solo importaba que Darius no detectara lo que estaba haciéndome pensar. el silencio entonces se prolongó un poco más dejando que siguiera hablando, era una señal de que estaba parcialmente de acuerdo con eso que decía puesto que no contra argumentaría sin tener una base, entre sombras y sombras se movía buscando una para poder salir unos instantes cegada por la ira provocada.

De frente hacia él, impulsada por el sentimiento se permitía volver a mostrar su silueta-TU!!!- estaba irritada de que una y otra vez tuviera razón, de que sus palabras fueran tan cayendo precisamente en el sitio, como si en unos momentos que había pasado con él se viese vuelto transparente, tan fácil de leer, siendo predecible. Sus manos le sujetaron unos minutos por el cuello, apenas si lo apretaba, queriendo estrangularlo solo para no oírlo más, no podía darse el lujo de existir alguien como él en el inframundo.

Pero ni con eso dejaba de hablar, seguía con sus palabras, incluso parecía degustar de molestarme con trivialidades, que hace mucho tiempo deseaba verlas de aquella manera pero estando con él solían ser más dolientes, las manos se mantuvieron estáticas sin apretar o sin dejar de hacerlo, la mitad inferior del cuerpo contenido en la sombra, mientras que la mitad superior permanecía visible y sin intención de retroceder en ese deseo de matarle.-No es así... no es amargura…disfruto lo que hago…-replico casi con voz cortada, sus ojos apenas tornaban cristalino como si deseara llorar, estaba acertando ese tonto, debía desaparecer.

Él está en el mejor de los lugares, su único castigo fue morir!- y entonces brotaba desesperadamente la verdad de sus labios volviéndose insoportable e incontenible lo que guardaba, estaba totalmente equivocado, Jenell había sido tan bueno que incluso antes de encontrarlo estaba en uno de los mejores sitios del inframundo, aquel espacio destinado para esas buenas almas que aún quedaban en la tierra. Lentamente una de las lágrimas rodo por su mejilla, sus manos soltaron su cuello dejándola inmovil y desbalanceada.

Esto no pareció ser de relevancia para Darius, lo cual le reconforto tranquilizándola, a pesar de haber sonado desesperada había dicho de manera tan tenue que parecía era la razón del por qué no la había escuchado, quizá si era una máscara pero era porque si se sentía tan susceptible jamás podría ser lo que ahora era, era solo una razón para renunciar a esa parte femenina y sentimental que desajustaba sus años de entrenamiento.

Pero las lágrimas no se contuvieron, puesto sus palabras estaban lastimando aquellos buenos principios que aquel hermano educo con fervor a su pequeña, estaba actuando totalmente en contra de lo bueno, de lo correcto y aun así apenas con esa culpa se sentía liberada puesto que al encontrarse con él había sido perdonada por haber aceptado seguir ese camino negro y tortuoso.- Yo lo elegí…no es bueno o malo pero es mi camino seré la mejor de los jueces del infremundo con estereotipo o no, Hades confiara ciegamente e incluso también protegeré a Persefone mejor que cualquiera de sus petalos Darius y lo are a mi manera esta que tu conoces, con todo y sus máscaras

por Krassen Crowley Lun Sep 23, 2013 11:45 pm

Así que protegerás a Persefone...~

Lagrimas se deslizaban por las tiernas mejillas de la fiel cierva de Hades, la cual también había respondido a mis palabras un tanto disgustada, teniendo mi cuello entre sus manos, aunque no se animo a apretar para que me callara, al parecer todo lo que dije era asimilable a una lluvia de ladrillos que golpeaban su cabeza, dejando esas marcas dolorosas en su mente, como solo la verdad lo sabe hacer. Fui capaz de sacarla de las sombras, debía de darme crédito, no pensé que volviese a salir de ahí honestamente.

Si la proteges, no me molestaría en lo absoluto, mejor que yo? adelante, eres libre de hacer como te plazca, no voy a entrar en una competencia de "quien hace su trabajo mejor?" por que ese no es el punto de arriesgarnos por el bien de alguien mas.~

Saque un pañuelo del bolsillo de mi chaqueta, y proseguí a limpiar rostro, retirando aquellas lagrimas que le humedecían, manteniendome indiferente al hecho de que ella estuvo a punto de agredirme, o mejor dicho tratar de ahorcarme.

Eres libre de ser como se te plazca, Etsu, no soy nadie para cuestionar tus decisiones e indagar en tu pasado, es solo que me sentía muy curioso, me importa aún mas por el hecho de que seremos compañeros inevitablemente en el inframundo, aunque mi diosa no tenga mando sobre ti ni Hades sobre mi, uniremos fuerzas en algún momento, creo que no debí preocuparme tanto después de todo. Aunque... de alguna forma me alegra saber que la mascara no es lo suficientemente fuerte como para contener aquellas lagrimas.~

Tome una de las manos de la señorita aquí presente, y coloque el pañuelo en esta, para que lo conservara si así lo deseaba, yo no seguiría molestándola a partir de ahora, admitiré mi aparente derrota, ya que mi ambición no es lo suficientemente fuerte como para permitirme tomar a la fuerza a una mujer mientras esta derrama lagrimas, y eso fue por mi culpa, algo que es aun mas frustrante.

Lo siento por el que hayas perdido, aunque no estoy tan seguro en que vayas a confiar en la veracidad de mis palabras.~

Suspire, desviando mi mirada hacia otro lado, ya no podia mirarla a la cara y llamarme a mi mismo un caballero, alguien que no lastima mujeres, lo predique todo este tiempo, y falle en mantener esas palabras, simplemente deberia retirarme en este mismo instante y dejarla en paz.

Te encuentras bien?~

por **Etsu** Jue Sep 26, 2013 8:39 pm

Mantuvo su silencio mientras aquellas lagrimas se impregnaban en el pañuelo ajeno, prometiéndose a sí misma no volver a dejar ese flanco susceptible, no era así, no debía ser así, mas no tenía que pretender lo contrario por esa ocasión esa clase de detalles era lo que le permitía seguir con su vida y cumplir con las expectativas depositadas. Apenas lograba sonreír amargamente comprometiéndose a ser como había sido hasta antes de encontrarse a alguien tan perspicaz como él.

Pero el tiempo era algo vital en esos momentos y descubrir cosas sobre uno mismo no era contemplado como la misión a la que había sido mandando, algo en él también había cambiado una vez alcanzado saciar esa curiosidad parecía perder el interés o lo que quiera que fuera por lo cual se limitaba a sujetar el pañuelo que le era entregado para posteriormente guardarle entre sus ropas. Pretendió ignorar su condolencia conteniendo la identidad de aquel que había perdido regocijándose de que no insistiera en saberlo, pues aún no estaba lista para soltarlo.

-Se ha hecho tarde- fue lo que dijo en lugar de un gracias, no insistió mas en cruzar la mirada y se tornaba un tanto distante no había más que hacer tenia trabajo que terminar y debía compensar aquel tiempo gastado en encontrarse a sí misma y conocer sus límites. Luego la pregunta repentina apareció- claro soy fuerte- respondió con una voz juguetona, mostrando la lengua para retroceder.-debo irme yo..te vere en el inframundo claro si lo encuentras

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